sábado, mayo 20, 2006

lagrimasYlluvia


Camino por la calle, un frió viento me alcanza a despeinar, es un frió tan profundo que cala mis huesos. Se que estoy abrigada, pero a pesar de eso, creo que me sentiría mas protegida si estuviera en tus brazos… ahora al viento se une una brisa que va acompañada de una fresca lluvia. Hay gotas en mi cara, en mi rostro; no importan, no las retiro, es delicioso sentir la suave caricia de las gotas de lluvia. Soy la única en la calle que no huye del agua, hasta que me doy cuenta de que estoy empapada y decido caminar al fin rumbo a mi puerta: llego hasta ella, tomo la llave, abro y justo cuando estoy a punto de cerrar, algo me detiene, eres tu con ese rostro tan maduro y tan inocente a la vez; te abrazo, tu no te niegas así los dos terminamos empapados… al fin hablas y me dices –ibas caminando por la calle a pesar de la lluvia- yo sonrió y asiento con la cabeza –¿me viste?- le pregunto… -así es, ¿estabas llorando?- me interrogas –como crees. ¡Es la lluvia!- y vuelvo a perderme en tu abrazo, tocas mi cabeza, acaricias mi rostro, dejo que limpies mis lagrimas que se pierden entre las gotas de lluvia.

No hay comentarios.: